¿Qué es el Síndrome de Asperger? I

¿QUÉ ES EL SÍNDROME DE ASPERGER? I.

El Síndrome de Asperger (SA), descubierto por Hans Asperger en 1943, es considerado como un trastorno del desarrollo que forma parte de los Trastornos del Espectro Autista (TEA) caracterizado por un conjunto de problemas mentales y conductuales.

Esta es una descripción algo técnica de lo que es. Sin embargo, cuando le explicas esto a alguien, la cara con la que te mira es: ¡Por supuesto, cuéntame más!" o como diría una amiga mía: "¡Guapa!", cuando ha dejado de prestar atención a lo que estabas diciendo. 

Bien, todo el mundo conoce al doctor Sheldon Cooper, de la serie The Big Bang Theroy y, de no ser así, os recomiendo verla. Según dicen, él es una clara representación, más o menos fiable (o mas o menos adaptada a la sociedad) de lo que sería un paciente (algo cómico y grotesco) con Síndrome de Asperger. 

Fisiopatología del Síndrome de Asperger. 

Volviendo nuevamente a un tono más técnico, el síndrome de Asperger es provocado por factores hereditarios que afectan a gran parte del funcionamiento cerebral de esto individuos. Según estudios neuroanatómicos, se produce una alteración en el desarrollo poco después de la fecundación por una migración anormal de las células embrionarias, que provocará una alteración del sistema nervioso central (SNC), afectando a los circuitos neuronales de las áreas de la conducta y el pensamiento.

Sin embargo, no existe ninguna teoría que explique el mecanismo que lo produce, pero podemos destacar una Teoría de la coherencia central débil, es decir, la incapacidad para prestar atención al conjunto, centrándose únicamente en los elementos que lo forman, en los detalles (y dentro de los detalles el que más le llame la atención atendiendo a cuáles son sus intereses). 

Nuevamente me gustaría hacer un nuevo paréntesis y explicar la Teoría de la coherencia central de forma un poco más simple: cuando nosotros tomamos una fotografía en la que se muestra un paisaje, con un vehículo aparcado y varias personas realizando diversas actividades: adultos que hablan, otros miran un mapa y los niños juegan; se puede ver incluso un lago en el fondo. Todo eso es lo que tu verías al tener la fotografía, un conjunto de detalles que conforman una imagen. Un paciente con síndrome de Asperger se centraría en algo concreto, que por algún motivo llamase su atención (el coche, por ejemplo) e ignoraría el contexto en que se encuentra.

Funciones cognitivas. 

La coherencia central es una de las tres funciones cognitivas que presentan los seres humanos. Pero, ¿qué son las funciones cognitivas?. Son todas aquellas que nos permiten desempeñar cualquier tarea y desenvolvernos en el mundo que nos rodea. Gracias a ellas, podemos realizar procesos de recepción, selección, transformación, almacenamiento y recuperación de la información. 

Podemos encontrar tres funciones:

• Función ejecutiva. Son un conjunto de habilidades cognitivas (conocimiento) de alto nivel, incluyendo la planificación futura, la flexibilidad, la búsqueda organizada, la memoria de trabajo, manejo del tiempo, toma de decisiones, etc. Se encuentran mediadas por los lóbulos frontales del cerebro.
• Teoría de la mente. Fue definida por David Premack en 1978 como la habilidad para atribuir ciertos estados mentales como creer, conocer, imaginar, engañar o adivinar a uno mismo y a los demás. Esto nos permitirá comprender y predecir la conducta de las personas que nos rodean. 
• Coherencia central. La capacidad para unir información de distintas fuentes para captar el conjunto más que el detalle (así podemos comprender el sentid de un texto o de una imagen). 

Ahora bien, ¿cuál es la relación de las personas con SA y estas tres funciones?, simple, carecen de ellas.

Ya hemos explicado el caso de la coherencia central débil. Ahora vayamos al déficit de la función ejecutiva. Las personas que sufren SA presentan conductas inadecuadas: un lenguaje repetitivo, respuestas prepotentes, tienen unos intereses muy limitados (recuerdo que mi madre me contó que un alumno suyo después de acercarse a ella y contarle todo su fin de semana, se fue y la dejó con la palabra en la boca porque poco le importaba a él lo que ella tuviera que decir). Este ejemplo es curioso y algo cómico si te lo imaginas, pero no es mala educación es, literalmente, falta de interés, acompañada de la falta de empatía que les caracteriza, aunque esto está más relacionado con la Teoría de la mente. 

 Al igual que los niños de cuatro años, y según los que describió Simon Baron-Cohen, Lesli y Frith, las personas del TEA no tienen teoría de la mente. Por tanto, van a tener una gran cantidad de problemas a la hora de relacionarse con otros individuos. 

Esto puede demostrarse con las historietas de Sally: 

En ella se muestra a una niña, Sally, que deja su pelota en una cesta y se va. Anne, cambia la pelota de la cesta a la caja cuando Sally no puede verla. Cuando vuelve, ¿donde buscará Sally la pelota?

• Sally buscará la pelota en la cesta porque es donde la ha dejado ella. 
• Sally buscará la pelota en la caja porque sabemos que Anne ha dejado la pelota en la caja.

¿Qué responderías tú?

Tanto un niño pequeño que aún no ha desarrollado su teoría de la mente como una persona con SA asegurarían que Sally buscará la pelota en la caja porque ellos parten del hecho de que, como nosotros, ella sabe que Anne ha cambiado la pelota de sitio. En ningún momento se plantean que Sally pueda pensar de forma diferente, sino que creen que todo lo que ellos saben y han visto lo sabe tanto Sally como las demás personas.

Esto, a las personas que sí que tienen una teoría de la mente, no los pasa. Son conscientes de que Sally ha dejado la pelota en la cesta en un principio y se ha ido, no ha visto a Anne, no conocía sus intenciones y ella, queriendo recuperar su pelota irá al lugar donde la dejo. Que nosotros sepamos que Anne la ha movido, no quiere decir que Sally lo sepa. Esto nos permite predecir la conducta de Sally.

Si extrapolamos esto a la vida real, no poder predecir que es lo que va a hacer una persona, que va a decir o como va responder ante nuestros actos o nuestras palabras, es algo que puede ponerles en graves problemas. A los niños les pasa continuamente, pero son niños, eso se les perdona (y sino, pues refunfuñamos un poco, pero los dejamos tranquilos, ya crecerán los mocosos estos).

Pero una persona con Síndrome de Asperger que no es capaz de comportarse segundo los complejos paradigmas sociales, puede ser rechazada, marginada y degradada. Tendrá problemas en el ámbito escolar, universitario, laboral y social. Será un inadaptado.

Una amiga, que también ha estudiado y tratado el tema de los TEA y en concreto el SA, me comentó que estas personas necesitan más que nadie aprender a comportarse, a adaptarse. Las personas sin este tipo de autismo lo hacen de forma innata, los que padecen SA necesitan aprender a hacerlo.

Es esta a la cuestión que a la que quería llegar: la necesidad de una psicoeducación de las personas que sufren SA en los colegios e institutos, es decir, de forma institucional, no algo que quede dentro de la familia y el médico de turno. En España está comenzando a hacerse, y es una práctica que debería extenderse y garantizarse en todos los centros de educación.

Tener un diagnóstico de SA no quiere decir que una persona no sea capaz de alcanzar sus metas, sin embargo deben ser apoyados, ayudados y "enseñados" para poder lograrlo, para poder tener las mismas oportunidades.


Gracias por leer :)